Hace ya más de un mes que recibí el nuevo libro de Manuel Carballal, "La vida secreta de Carlos Castaneda".
Hasta hoy que he acabado de leerlo, no he querido dar mi opinión, porque no me gusta opinar de lo que no conozco... no sea que por imprudente, me pille el toro, y en casos de personas, como es Castaneda, que a muchísimos de nosotros nos han marcado durante una etapa de nuestra vida, hay que ser cautos.
Leer un "tocho" de 606 páginas en el que a Manu solo le falta contarnos las horas a las Castaneda se aseaba, ha sido una aventura que he estado viviendo en mis ratos libres, que no son muchos, y robando horas al sueño. Pero ojalá, que todos libros que siga leyendo en mi vida, sean tan esclarecedores como este.
Tenemos los humanos la mala costumbre de subir a los altares a quienes no lo merecen, porque nos hace ilusión, porque nos caen bien, nos gustan, o porque creemos que en ellos vamos a encontrar solución o respuesta a nuestros males, incógnitas, o conexiones con las divinidades que nos hacen sentir integrados en mundos superiores.
Hasta hoy que he acabado de leerlo, no he querido dar mi opinión, porque no me gusta opinar de lo que no conozco... no sea que por imprudente, me pille el toro, y en casos de personas, como es Castaneda, que a muchísimos de nosotros nos han marcado durante una etapa de nuestra vida, hay que ser cautos.
Leer un "tocho" de 606 páginas en el que a Manu solo le falta contarnos las horas a las Castaneda se aseaba, ha sido una aventura que he estado viviendo en mis ratos libres, que no son muchos, y robando horas al sueño. Pero ojalá, que todos libros que siga leyendo en mi vida, sean tan esclarecedores como este.
Tenemos los humanos la mala costumbre de subir a los altares a quienes no lo merecen, porque nos hace ilusión, porque nos caen bien, nos gustan, o porque creemos que en ellos vamos a encontrar solución o respuesta a nuestros males, incógnitas, o conexiones con las divinidades que nos hacen sentir integrados en mundos superiores.