domingo, 30 de agosto de 2015

TODOS LOS DIAS SON DE DIOS (SABIDURÍA LAKOTA)

 
Siempre que, en el curso de la caza diaria, el cazador piel roja se encuentra con una escena que es sorprendentemente bella o sublime (una nube negra de tormenta que brilla, el arco iris sobre la montaña, una cascada blanca en el corazón de una garganta verde; una vasta pradera teñida con la sangre roja de la puesta del sol...) hace una pausa por un instante en  actitud de adoración.
 
Él no ve la necesidad de santificar un día de cada siete, ya que para él todos los días son de Dios.
 
Debemos saber que todas las cosas son las obras del Gran Espíritu.
 
Debemos saber que Él está dentro de todas las cosas: los árboles, las hierbas, los ríos, las montañas, y todos los animales de cuatro patas, y los pueblos alados; y aún más importante, debemos entender que Él también está por encima de estas cosas y de los pueblos.
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario